El autoconcepto: el encuentro con uno mismo

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“Al ser humano, en cuyas raíces se encuentra la esencia de su propia conquista”

¿Quiénes somos? la pregunta no es nueva, probablemente ha atormentado a la humanidad desde el amanecer de la civilización, y es que somos mucho más que nuestros cuerpos, somos de alguna u otra forma el resultado de miradas y palabras que nos ofrecen los otros a manera de espejo. Gracias a ese reflejo es que podemos adquirir parte de nuestra propia personalidad.

El autoconcepto, es la forma en que cada persona se valora y evalúa a si misma. Se logra a partir de la percepción que se tiene del medio en el que se desenvuelve todo individuo, a partir de las realidades y de las actitudes vivenciadas en especial de los medios más importantes como, por ejemplo, la familia o la escuela y de las personas más significativas como los padres o maestros. Gracias a éstos es que el autoconcepto se convierte en una construcción diaria y significativa. Sin embargo, es importante dejar claro que este concepto no es inamovible, por el contrario, se va construyendo a lo largo de toda la vida y es que en realidad la esencia del ser humano nunca esta determinada o estática.

Pero ¿a partir de qué momento comienza el desarrollo del autoconcepto? Se desarrolla desde los primeros meses de vida con la relación que tiene el bebé con su madre, por eso, la aceptación de los hijos tal y como son con sus características tanto físicas como intelectuales, y no como desean los padres que sean sus hijos, constituyen la base de un buen desarrollo psicológico, es decir, de la conformación de un autoconcepto adecuado.

La percepción que tenga el niño sobre alguna inconformidad o rechazo sean o no manifiestos literalmente, afectarán el autoconcepto, por lo que se sentirá inseguro y temeroso para enfrentarse al mundo exterior. Es decir, en la conformación del autoconcepto se entrelazan dos aspectos importantes la confianza y la seguridad que recibe primariamente por parte de sus padres y que posteriormente cuando esté listo para engrandecer su horizonte será determinado por figuras significativas de su medio.

Por lo anterior, es que los profesores juegan un papel importante en la conformación de este concepto, es importante el hecho de que el profesor crea y confíe en el alumno y que se lo haga saber claramente. Es necesario creer en el valor del otro para poder transmitir un sentimiento de valía y reconocimiento personal que dé calidad a la conformación de la personalidad. Pues si se transmite lo contrario, la vida de una persona que no tiene un autoconepto positivo enmarca en su vida con un sentimiento de minusvalía y desconfiado de sus propias capacidades y de la trascendencia que pueden llegar a tener.

La manera en que podemos reforzar positivamente el autoconcepto es:

  • Prestar atención a sus intereses alabándole en las circunstancias oportunas.
  • Aprobar sus relaciones positivas con los demás.
  • Destacando aquellos aspectos que potencian su individualidad.
  • Animarle a expresar sus propias ideas.
  • Hacerle ver las “alternativas” en la toma de decisiones.
  • Darle y confiarle responsabilidades cada vez más complejas.
  • Reafirmarle en sus influencias positivas sobre los demás.
  • Dejar y aceptar que se equivoque.

Todos tenemos un autoconcepto, es decir, una idea de nosotros mismos, y ésta nos afecta en diversas dimensiones llámese corporal, intelectual, o actitudinalmente, pues al percibirme de una manera, proyecto en el contexto cómo me siento interiormente. Reacciono frente a las situaciones de manera congruente, debido a que mi autoconcepto va a marcar cualquier circunstancia reforzando así la imagen que tengo de mí y de los demás.

Podemos entender entonces, la importancia de una mirada de afecto y aceptación en la que podemos hacerle sentir a la persona que es único, maravilloso e irrepetible, y de esta manera ir formando personas que se aman por sobre todas las cosas.

El espíritu interior siempre es bello y digno de ser amado, sin importar cómo pueda cambiar nuestra experiencia exterior. Elizabeth Bonilla Herrera * Lic. En Psicología. Egresada de la Universidad Intercontinental.

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